¿Cómo calmar la ansiedad de un perro?
Al igual que las personas, los perros también pueden sufrir ansiedad por diferentes motivos. Quedarse muchas horas solos, no realizar el suficiente ejercicio o recibir una escasa estimulación son algunos desencadenantes de esta sensación que mezcla miedo y nerviosismo. Por lo tanto, no es un estado que el perro muestre por fastidiarnos o manipularnos, sino que es el resultado de unas vivencias que le resultan altamente estresantes y que va a intentar aliviar mediante el desarrollo de conductas que encontraremos inapropiadas, como la destrucción de objetos, la eliminación en el interior del hogar o los ladridos continuos.
CBD o cannabidiol para perros
El CBD o cannabidiol es una sustancia no tóxica procedente del cáñamo (Cannabis sativa) que se sabe consigue efectos beneficiosos en el organismo del perro. Estos todavía están siendo investigados, pero engloban, entre otros:
- La disminución de la inflamación.
- El alivio del dolor.
- El aumento de la relajación.
Por estos motivos, el CBD se puede utilizar para calmar la ansiedad en perros. En concreto, actúa sobre el llamado sistema endocannabinoide, que se encuentra en el organismo de todos los mamíferos y es el encargado de la regulación de múltiples funciones vitales de gran importancia, como el sueño, el dolor, el estado de ánimo o el apetito. El CBD ayuda a mantener el equilibrio natural en este sistema, de ahí efectos beneficiosos como los mencionados.
Aunque procede del cáñamo, hay que saber que se retiran las sustancias que se relacionan con efectos psicotrópicos (THC), por eso el perro puede disfrutar de los beneficios de esta sustancia, sin temor a las consecuencias negativas que solemos asociar al consumo de cannabis, como la adicción o el "colocón". Por este motivo, el CBD es legal y completamente seguro para los perros.
Ahora bien, ¿cómo dar CBD para calmar la ansiedad en un perro? En Naturecan disponen de varios productos de CBD para mascotas, elaborados en formato aceite o premios comestibles. Todos ellos aportan distintas propiedades y beneficios para los perros y están elaborados por expertos en animales de compañía, por lo que son de alta calidad. Además, son productos veganos. Para la ansiedad, disponemos, como hemos comentado, del aceite de CBD para perros y los premios relajantes de CBD. El aceite se puede ofrecer directamente o mezclado con la comida, siguiendo las indicaciones en cuanto a dosis y frecuencia de uso. Por su parte, las golosinas se ofrecen directamente gracias a su alta palatabilidad. Escoger uno u otro dependerá de las necesidades particulares de tu perro.
Consulta con tu veterinario o sigue las indicaciones del fabricante para establecer la dosificación más adecuada para tu ejemplar, pues la concentración de cada producto puede variar según la opción que escojas.
Compañía
Ante un perro con ansiedad, además de, como indicamos, ponernos en manos de un profesional lo antes posible, debemos reaccionar ofreciendo más de nuestro tiempo. Esto no quiere decir que tengamos que estar todo el día pegados a él, pero sí podemos reducir su ansiedad si limitamos, al máximo, el número de horas que se queda solo.
Por ejemplo, podemos llevarlo con algún familiar si nos ausentamos todo el día, buscar un paseador de perros o recurrir a una guardería canina. Además, durante nuestra ausencia es recomendable que dejemos a su disposición juguetes interactivos, tipo kong, por ejemplo, con los que pueda entretenerse y recibir estímulos
Por supuesto, prepara en casa un espacio seguro para que no pueda lastimarse ni romper nada de valor, de ser el caso. Según vayas trabajando con el profesional podrás ir aumentando, progresivamente, la cantidad de horas de soledad.
Rutina
No al nivel de los gatos, pero los perros también son animales de costumbres. Esto significa que les da tranquilidad saber en qué orden suceden las acciones de su día a día. Por ejemplo, salir a pasear, comer al llegar y que tú te marches a trabajar. Intenta mantener siempre los mismos horarios para darle la previsibilidad que necesita. En otras palabras, si sabe que te vas, no te pedirá jugar, con lo que no se estresará ante tu negativa, pero sí lo hará a tu regreso.
Ejercicio
Hay que tener claro que los perros no solo salen a pasear para hacer sus necesidades. Requieren actividad física y, aunque sea mayor o menor en función de sus circunstancias, ya que, por ejemplo, no tendrá la misma energía un cachorro que un anciano, un mínimo de dos paseos diarios en los que se les debe dejar que exploren a sus anchas.
Procuraremos ofrecerles espacios seguros en los que puedan correr, jugar, interaccionar con sus congéneres, etc. De esta forma, queman su energía, se relajan y disminuye su ansiedad. Además, en casa también podemos jugar con ellos, igual que es posible anotarlos, si lo necesitan, en actividades deportivas para perros.
Estimulación
El perro no necesita solo estimulación a nivel físico, como hemos visto. Su cerebro también tiene que estar sometido a desafíos que combatan el aburrimiento.
Así, para calmar a un perro con ansiedad, podemos estimularlo enseñándole diferentes órdenes, practicando actividades como el agility, que combina ejercicio y obediencia, u ofreciéndole diferentes juguetes interactivos, que le obliguen a pensar.
En cualquier caso, dedicarle tiempo a tu perro para realizar cualquier actividad física, psicológica o ambas es una buena forma de establecer y reforzar el vínculo entre ambos, lo que también ayuda a calmar su ansiedad.
Sustancias tranquilizadoras
Existen una serie de sustancias que se sabe que cuentan con efectos calmantes en los perros. En los últimos años se han ido introduciendo en distintos productos, como piensos, galletas o distintos premios.
Su ingesta, siguiendo las indicaciones del fabricante o del veterinario, puede ayudar a mantener al perro más tranquilo, recordemos, mientras se trabaja con el etólogo sobre la causa de la ansiedad. También existe otra opción en este sentido, como son los collares, los aerosoles o los difusores de enchufe que desprenden feromonas tranquilizadoras.
Por último, podemos mencionar las flores de Bach. Hay que saber que no se les ha demostrado más efecto que el placebo, pero carecen de contraindicaciones y sí han reportado buenos resultados en la práctica clínica.
Medicamentos
Al igual que para las personas, en la farmacia puedes encontrar distintos fármacos con efecto tranquilizante o sedante. Nunca, en ninguna circunstancia, debes darle a tu perro nada que no le haya recetado para ese caso concreto el veterinario.
Así mismo, jamás le administres medicamentos para humanos que puedas tener en casa. Insistimos, si te preguntas qué se le puede dar a un perro para la ansiedad, solo el profesional puede valorar si tu perro necesita algún fármaco para combatir su ansiedad, en qué cantidad y por cuánto tiempo.
Como hemos explicado, un perro no muestra ansiedad para fastidiar, sino como resultado de diferentes circunstancias. Si lo castigas, agravas ese estado, aumentas su nerviosismo y, por lo tanto, contribuyes a empeorar el problema en vez de a solucionarlo. Ante una conducta ansiosa mantén la calma y céntrate en premiar aquellas buenas acciones que realiza el animal y que pretendes que repita.