La importancia del sueño en tu perro: consejos para mejorar su descanso
El sueño desempeña un papel crucial en la vida de nuestros fieles amigos de cuatro patas. Más allá de ser un simple periodo de descanso, el sueño en los perros está intrínsecamente ligado a su salud física y mental.
La importancia del sueño en los perros
El sueño influye significativamente en el desarrollo cognitivo, el control de peso, el fortalecimiento de vínculos sociales y ayuda a prevenir problemas de conducta. Por eso, si priorizamos su descanso, estaremos velando por el bienestar integral de nuestros fieles compañeros y mejorando su calidad de vida.
- Recuperación física: El sueño contribuye a la recuperación física al promover la reparación celular, fortalecer el sistema inmunológico y estimular la producción de hormonas del crecimiento. Esto asegura la salud general y vitalidad de nuestros compañeros peludos.
- Consolidación de la memoria y aprendizaje: Al igual que en los humanos, el sueño juega un papel esencial en la consolidación de la memoria y el aprendizaje en los perros. La falta de sueño puede afectar negativamente su capacidad para aprender, recordar y adaptarse a su entorno.
- Regulación del estado de ánimo: El sueño influye en el estado de ánimo de los perros, contribuyendo a mantener un equilibrio emocional. Un descanso insuficiente puede provocar irritabilidad y ansiedad.
- Mantenimiento del peso corporal: un descanso adecuado ayuda a regular las hormonas que controlan el hambre y la saciedad, ayudando a mantener un peso saludable.
- Fortalecimiento de vínculos sociales: dormir con nuestros perros ayuda a generar un sentimiento de seguridad y pertenencia en ellos, lo que resulta muy beneficioso para su bienestar emocional y para fortalecer el vínculo entre ambos.
- Prevención de problemas de conducta: un óptimo descanso ayuda a prevenir problemas de comportamiento, como la agresividad o las conductas destructivas, favoreciendo un comportamiento más equilibrado en los perros.
¿Qué fases tiene el sueño en los perros?
Al igual que los humanos, los perros pasan por diferentes fases del sueño que se dividen en dos categorías principales: el sueño de movimientos oculares rápidos (REM) y el sueño de ondas lentas (NREM).
Fase REM:
En la fase de sueño REM (Rapid Eye Movement), la actividad cerebral es intensa y los ojos del perro se mueven rápidamente. Durante esta fase, los perros pueden experimentar sueños vívidos y la actividad fisiológica es similar a la de los humanos. Esta etapa es fundamental para el proceso de consolidación de la memoria y el aprendizaje.
Fase No REM:
La otra fase, el sueño de ondas lentas o No REM, se divide en varias etapas, desde un sueño ligero hasta uno más profundo. La actividad cerebral se reduce y los músculos se relajan. Es durante esta fase cuando los perros experimentan la fase de descanso más reparadora.
La duración de estas fases puede variar según la edad y la raza del perro. Por ejemplo, los cachorros pasan más tiempo en la fase REM, lo que es esencial para su desarrollo cerebral. A medida que se van haciendo mayores, la proporción de tiempo que pasan en sueño profundo No REM aumenta.
Consejos para mejorar el descanso de tu perro
1. Elección de la cama adecuada
El primer paso para garantizar el descanso de tu perro es proporcionarle una cama cómoda. Sin embargo, debes saber que no todos los perros tienen las mismas necesidades, por lo que es esencial tener en cuenta su tamaño, su edad y sus preferencias individuales. Por ejemplo, mientras que los cachorros disfrutan de camas más suaves y mullidas, para los perros mayores es mejor optar por camas ortopédicas.
2. Ubicación de la cama
La ubicación de la cama también influye en la calidad de sueño. Nuestra recomendación es que coloques la cama en un lugar cómodo y tranquilo, lejos de corrientes de aire y ruidos que puedan molestarle. Evita también colocar la cama en lugares de mucho paso. De esta forma, podrá relajarse y dormir las horas que necesite sin interrupciones.
Ten en cuenta las preferencias de tu perro. Algunos disfrutan de lugares elevados para poder ver lo que hay alrededor, mientras que otros prefieren rincones más resguardados donde sentirse seguros.
También es importante que te asegures de que la habitación donde duerme esté lo más oscura posible durante la noche.
3. Crea una rutina
Establecer una rutina nocturna no solo implica fijar una hora para dormir, sino también realizar una serie de actividades tranquilas que le indiquen a tu perro que es hora de relajarse. Por ejemplo, juegos suaves, caricias o un pequeño snack antes de acostarse. De esta forma, irá creando asociaciones positivas y disfrutará del momento de irse a la cama.
4. Juguetes y mantas reconfortantes
Ponle juguetes y mantas suaves que contribuyan a mejorar su descanso. A algunos les gustan los juguetes masticables, mientras que otros prefieren acurrucarse junto a una manta suave. Nadie mejor que tú conoce a tu perro y sabe lo que podría gustarle.
5. Limita el agua y la comida
Para garantizar que tu perro tenga una noche tranquila y sin interrupciones, evita que coma o beba mucha agua justo antes de dormir. De esta forma, además de evitar malestares digestivos, evitarás que tu perro se despierte con urgencia durante la noche. En este sentido los dispensadores de agua y comida pueden ser muy útiles para programar las raciones diarias.
6. Ejercicio regular durante el día
El ejercicio contribuye a que tu perro disfrute de un sueño profundo y reparador. Los paseos son una estrategia muy eficaz para que tu perro gaste la energía acumulada durante el día y garantizar que llegue a la hora de dormir con el nivel de cansancio adecuado. Pero además, permiten que tu peludo explore y lo estimulan mentalmente, lo que es esencial para una buena calidad de sueño.
Asegúrate de que el paseo sea lo suficientemente largo para satisfacer las necesidades de tu perro, pero no tan extenso que lo sobreexcite justo antes de acostarse.
7. Atención a la salud dental
Curiosamente, el cuidado dental también juega un papel clave en el descanso de nuestros fieles compañeros, ya que pueden causar molestias e impedirle descansar correctamente. Por eso, es importante establecer una rutina de cepillado dental y proporcionarle juguetes masticables que favorezcan una buena salud oral.
Mi perro ronca cuando duerme
El ronquido durante el sueño no es exclusivo de la edad, sino que se relaciona más con las razas. Así las razas braquicéfalas como el Bulldog, Pekinés, Pug, Bóxer suelen tener ronquidos desde cachorros y aumentan con el paso de los años.
Cuando el ronquido se da en estas razas puede ser signo de varias patologías relacionadas con esta conformación, por el estrechamiento anatómico de las vías respiratorias aéreas superiores, que se crea una presión intrarespiratoria negativa durante la inspiración, por el paladar blando elongado, por la estrechez o estenosis de los ollares y el colapso de la laringe.
¿Qué hacer si mi perro tiene pesadillas?
Del mismo modo que nosotros, los perros también pueden tener pesadillas. Es cierto que no pueden expresar sus sueños, pero su comportamiento mientras duermen puede indicarnos si están experimentando un mal sueño.
Durante el sueño REM, pueden manifestar movimientos involuntarios, ladridos, gemidos o incluso mover las patas, lo que indica que están soñando. Si notas que tu perro está teniendo pesadillas, es importante abordar la situación con delicadeza y sensibilidad.
No lo despiertes bruscamente, ya que esto podría generarle confusión y ansiedad. Acércate con calma, háblale en tono tranquilo y acarícialo suavemente para que se despierte de manera gradual y ayudarle a disipar cualquier sentimiento de ansiedad.
Si las pesadillas son frecuentes o afectan a la calidad del descanso de tu perro, es recomendable que lo consultes con tu veterinario, pues podría ser indicativo de ansiedad u otros problemas de salud que requieren atención profesional.